Sin caer en facilismos
ni en una simplificación gratuita,
podemos hablar de tres espacios de comprensión,
claramente complementables
de lo que vivimos.
La primera es la visión del “entorno-mundo”
que descubrimos cada día, desde bebé
y nos llena de estupor.
En ella intervienen la familia, la sociedad
y quienes nos orientan
a “cómo ordenar la mente”…
Lo que nos dicen es aceptado
porque ellos “son los que saben”.
Estas convicciones y creencias
son muy fuertes…
no precisan necesariamente comprobación.
Una segunda es la búsqueda
de un “principio organizador mental”
que nos permita comprender
el aparente caos que nos rodea…
La filosofía y la metafísica
son hijas de este esfuerzo,
seguidas por las ciencias que se fundamentan
en lo comprobable.
La tercera es aquella, por la meditación,
en la que dejamos en suspenso
creencias y convicciones (primera instancia),
argumentos y comprobaciones (segundo momento)
permitiendo que surja una percepción,
desde nuestro interior por el aquietamiento espiritual
y la meditación.
En la calma
descubrimos que somos en conexión
con todo lo que es,
partes de un todo mayor
y contenidos en esa inmensidad…
13 de Mayo de 2016
gracias!
ResponderBorrarGracias de mi parte por tu comentario y feliz de poder haber sido útil!!!!!
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